¿Qué nos puede contar de Cerro Gordo?
Agraria Cerro Gordo, está ubicada en Granada, más concretamente en Ventorros de San José, situada en el Poniente Granadino. Con una orografía montañosa y a una altitud de 900 metros sobre el nivel del mar, allí se encuentran los olivares de cultivo tradicional, más de 3000 hectáreas gestionadas por más de 800 familias, de donde extraemos nuestro aceite de oliva virgen extra. La mayoría de las fincas son pequeñas explotaciones trabajadas por las familias del pueblo, heredadas de generación en generación.
En nuestra cooperativa seleccionamos nuestro mejor aceite de oliva Virgen Extra para envasarlo y distribuirlo directamente a nuestros socios y clientes, bajo las marcas Cerro Gordo y Cerro Gordo Selección. Del resto de nuestra producción, en torno al 80% de la misma se gestiona a través del área de Graneles de S.C.A Almazaras de la Subbética, integrada por 17 cooperativas – 15 de la zona de Córdoba y 2 de Granada- bajo el nombre Almaliva Group, y como cooperativa matriz S.C.AAlmazaras de la Subbética. Este grupo en la campaña pasada gestionó más de 60.000 toneladas de aceite de oliva, de hecho, es el tercer grupo más importante a nivel productivo en el entorno nacional. El eje sobre el que gira todo el proyecto de Almaliva Group es la calidad, es la apuesta más fuerte para conseguir diferenciación y posicionamiento de nuestros aceites en el mercado.
¿Cómo fue la última campaña oleícola? ¿Cómo pintan las siguientes?
La campaña 2022/2023 está siendo una campaña complicada debido a las escasas lluvias, la producción se ha visto mermada en más del 50%, afectando también a la calidad del aceite. En nuestro caso particular, debido al aumento de socios experimentado en las últimas campañas, hemos amortiguado algo esa bajada de producción con la incorporación de nuevas explotaciones a nuestra cooperativa. Hemos de resaltar las obras de modernización que hemos llevado a cabo, tanto en zona de recepción como en fábrica, con lo que actualmente contamos con unas instalaciones totalmente renovadas y preparadas para optimizar nuestro proceso de producción y prestar mejores servicios a nuestros socios.
Las próximas campañas, si la escasez de lluvia se mantiene junto con la subida de los costes de producción y la entrada en vigor de la nueva PAC, que en nuestra zona supone una reducción de las ayudas anteriores en algunas explotaciones de hasta un 40%, podríamos hablar de campañas desastrosas. Nos iríamos a niveles de producción muy bajos, donde la rentabilidad del cultivo del olivar desaparecería. Es más, en algunas zonas se podrían producir daños irreparables llegando a darse la imagen de ver olivos secos debido a la sequía extrema.
¿Cómo les está afectando la inflación? ¿Cómo pinta el resto del año 2023?
La inflación como a todos los sectores y a los propios particulares nos afecta de manera negativa. Principalmente, incide en el aumento de los costes de producción tanto en campo como en fábrica, pero es, sin duda, el encarecimiento de la energía el que en mayor medida nos afecta en las almazaras, puesto que, junto a los costes de personal, el suministro eléctrico tiene gran peso en nuestra cuenta de resultados. Por todo ello, aunque podemos hablar de precio récord del aceite, la rentabilidad del agricultor es igual o inferior a la de campañas anteriores. Esta situación de precios tan altos puede derivar en un desvío del consumo a otro tipo de grasas que, aunque sean menos saludables, el consumidor adquiere por precio más económico. Ahora bien, la actual campaña no se está viendo tan agravada ya que, si el consumo se mantiene, se podría llegar a hablar de escasez de aceite de oliva. El problema, más bien, lo tendremos cuando volvamos a tener campañas de producciones normales o de superproducciones que, aunque los precios bajen, tendríamos que volver a llegar al consumidor.
En definitiva, el 2023 va a ser un año complicado para el sector del aceite de oliva ya que podemos hablar de la peor cosecha del siglo, y las previsiones para la próxima campaña indican que, aunque la floración es abundante, si las lluvias tardan unos días en aparecer, será aún más desastrosa que la actual.
¿A qué lugares llegan sus productos?
Nuestros productos principalmente se comercializan a nivel nacional. Tenemos clientes importantes sobre todo en País Vasco y Cataluña, aunque nuestro principal cliente es del ámbito local, GRUPO ABADES, que es uno de los grupos más importantes de España en hostelería y restauración. Asimismo, realizamos algunos envíos internacionales a Alemania y Bélgica, pero es cierto que la venta en mercados internacionales es uno de nuestros principales objetivos a corto-medio plazo para obtener un valor añadido, por lo que nos gustaría en el futuro poder ampliar nuestras exportaciones.
¿De qué manera trabajan en aras de mejorar la rentabilidad de sus socios?
Como hemos comentado hemos invertido en nuevas instalaciones, consiguiendo con ello mejor rentabilidad para los socios, por varios motivos: el ahorro energético en instalaciones; la obtención de mayor productividad y mayor calidad, por consiguiente, mejor precio; los ahorros en personal y tiempos de trabajo.
¿Hasta qué punto es importante apostar por la innovación?
La innovación es un factor importante que no podemos perder de vista, debe ser una constante. Los procesos productivos están en constante modernización y hay que estar en la carrera por no quedarse obsoleto, la innovación hace que podamos optimizar procesos, mejorar en calidad y ser cada día más sostenibles. Lo importante de verdad son nuestros socios y con innovación conseguimos mejorar la rentabilidad para ellos.
