Capricho Andaluz se ocupa de la producción y comercialización de aceite de oliva virgen extra, así como de una amplia variedad de salsas ¿Cómo valoran el transcurso de estos primeros meses del año?
Está siendo un año atípico por todo el efecto de las materias primas, que están influyendo de manera importante en los productos agrarios, pero, dentro de ellos, nuestro producto, que tiene un valor añadido importante y que supone una solución importante para la hostelería, está funcionando satisfactoriamente y en línea con la evolución que llevamos en los últimos años.
¿A qué nuevos retos se enfrenta el sector en la actualidad?
Son momentos complicados. La inflación o todos los problemas de los productos agrarios derivados de la sequía están provocando una subida de costes importante que repercute, a su vez, al sector horeca, que es al que nosotros nos dirigimos principalmente. Poder adaptarse al entorno es, evidentemente, un reto muy importante y complicado. Hay que intentar, en la medida de lo posible, ayudar a toda la hostelería para que disponga de soluciones con el menor coste posible.
Incidiendo en la producción, ¿hacia dónde se dirige la misma? ¿Dónde comercializan esta producción en mayor medida?
Nosotros estamos enfocados, principalmente, en el sector horeca a nivel nacional. Es decir, en todas las categorías de hostelería en España, ya sea restauración en ruta, colectividades, hoteles, bar y cafeterías independientes.
No obstante, cabe destacar que en los últimos tiempos estamos haciendo un importante esfuerzo para incrementar nuestro volumen de internacionalización. En efecto, queremos crecer en este sentido y, por ello, nos dirigimos hacia la venta en otros países más allá de los lugares a los que ya vendemos, como son Estados Unidos, Canadá, Italia, Brasil, Marruecos, Francia o Polonia. O sea, estamos intentando mirar hacia el exterior para complementar las ventas que hacemos a nivel nacional.
¿Están siendo buenas las sensaciones a la hora de exportar más allá de nuestras fronteras?
Sí, están siendo muy positivas. Todos sabemos que iniciarse en el mundo de la exportación es complicado, pero, aprovechar nuestras fortalezas nos está permitiendo alcanzar resultados muy positivos en este sentido. Y auguramos que una parte muy de las monodosis que se vende o que se venderán en los próximos años, sea a nivel internacional.
¿Cómo se valora el producto español, y concretamente los productos de Capricho Andaluz en el ámbito internacional?
Bajo mi punto de vista, creo que cada vez más los productos marca España tienen mejor imagen fuera de nuestro país. Así lo percibimos en nuestro caso, en el caso de Caprichos Andaluz. Consideramos que añadimos valor a la marca España y, sobre todo, a la marca Andalucía porque, al final, nuestro aceite, por ejemplo, es un producto muy bien valorado a nivel internacional y que se identifica con calidad.
En términos de innovación, ¿en qué han aunado esfuerzos durante estos últimos años?
Dentro del mundo del horeca y de las monodosis, que es lo que nos ha caracterizado siempre, nuestro desarrollo de negocio y nuestro I+D han estado enfocados en alcanzar productos cada vez más sostenibles. En base a ello, sacamos las primeras tarrinas de aceite con materiales hasta el 95% reciclados, que fue nuestra gran apuesta en estos tiempos, y justo ahora estamos enfocados en el lanzamiento de la primera tarrina elaborada a partir de un material compostable: una apuesta que aúna toda la sostenibilidad, algo muy importante en los productos de nuestra época.
¿Qué proyectos ponen sobre la mesa desde Capricho Andaluz de cara a los próximos meses?
Pues, como decía, estamos muy centrados en la sostenibilidad. Capricho Andaluz ha conseguido también certificarse como empresa residuo cero y vamos a lanzar esa tarrina compostable en la que estamos trabajando.
Asimismo, seguimos desarrollando nuestro I+D para darle los próximos meses y años productos aún más sostenibles y enfocados a esa doble vertiente: que garantice utilidad al cliente, pero a la vez sea amigable con el medioambiente.
