Nuestro comercio necesita adaptarse y responder ágilmente a los cambios guiados por un desarrollo tecnológico vibrante en el que la digitalización, la inteligencia artificial, el comercio electrónico y otras innovaciones tecnológicas han revolucionado la forma en que las empresas operan y se relacionan con los consumidores. Hoy nuestros comercios están llamados a sumarse a esta ola siendo flexibles y adaptándose a los nuevos hábitos y preferencias de un cliente cada vez más conectado, informado y más exigente.
En esencia el comercio de toda la vida tiene ahora el gran reto de competir con los grandes en un mundo en el que la tecnología abre posibilidades antes nunca imaginadas.
Ante este contexto inquietante y retador, en Andalucía estamos haciendo los deberes y apostamos por un modelo comercial competitivo, sostenible y cercano que aporta dinamismo a los centros urbanos, siendo parte esencial del presente y el futuro del desarrollo de nuestras ciudades y pueblos, especialmente en las zonas rurales. Pero siendo también conscientes de la gran cantidad de pymes y autónomos en el sector comercio que van dejando sus negocios por la falta de rentabilidad, especialmente afectados en estos últimos años por el encarecimiento de la energía y de las materias primas.
La herramienta esencial en nuestra Comunidad es el VII Plan Integral de Fomento del Comercio Interior de Andalucía 20023-2026 impulsado por la Consejería de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo de la Junta de Andalucía, que cuenta con más de 90 millones de euros de inversión hasta el año 2026 y que tiene como objetivo fomentar el crecimiento, la consolidación, la competitividad y la digitalización del sector acorde con las circunstancias actuales. Dicho plan, elaborado con la participación de los propios agentes económicos y sociales integrantes del Consejo Andaluz de Comercio, parte de la importancia que tiene este sector en nuestra economía y su notable contribución a la generación de empleo y riqueza. Cuenta con más de 136.000 empresas y 166.000 establecimientos comerciales, donde desarrollan su actividad más de 540.000 trabajadores. Pone el foco en el impulso de la competitividad y aborda los retos de la transición digital y verde del sector comercial desde una perspectiva integral y oportuna.
Desde mi punto de vista, uno de los aspectos clave que aborda es el fomento emprendedor con especial interés en el relevo generacional. Pues tal y como se expone, “Es un hecho que numerosas empresas familiares del sector comercial se extinguen actualmente en Andalucía debido a una mala planificación de la sucesión en la gestión de la empresa” Siendo la elección de la persona más idónea como sucesor fundamental para la continuidad de la empresa en el tiempo y su necesaria evolución. Esta circunstancia es de especial trascendencia en las zonas rurales, en las que se produce el cierre de negocios debido a la falta de relevo generacional. Ante este reto el plan propone dotar de la información, apoyo y capacitación necesaria para hacer posibles estrategias de transición bien planificadas.
Unir el talento joven con la experiencia es una fórmula ganadora para el comercio.
Se trata de una medida muy relevante porque se están poniendo las bases en Andalucía para poder emprender a través de un negocio ya en funcionamiento. Dicha posibilidad tiene ventajas manifiestas al no comenzar desde cero la creación y puesta en marcha de una idea empresarial. Contando con contar con un equipo con experiencia en el sector y el mercado, la notoriedad y una cartera de clientes ya activa. Hablamos, por tanto, de tomar el testigo de un negocio ya viable económicamente contando con el apoyo y acompañamiento necesario. Además, para la persona empresaria que realiza la transmisión es una forma de dar continuidad a su iniciativa empresarial, pudiendo obtener una rentabilidad económica tras la inversión y el esfuerzo realizado durante años en la creación y desarrollo de su negocio.
Como punto de partida se identificarán las actividades económicas que necesitan un
relevo generacional, ya sea por la jubilación, incapacidad u otras causas que afectan a sus titulares al ser actividades claves, especialmente en el ámbito rural. Para ello, el plan contempla la creación de un mapa interactivo de oportunidades de negocios en el territorio que pondrá en contacto la oferta y la demanda, donde las personas que finalicen su trayectoria profesional y los emprendedores que deseen continuar el negocio pongan en común las bases para la transmisión de la empresa. Se contempla además hacer un esfuerzo de difusión y formación en este campo.
Especialmente relevante es la guía que explica cómo elaborar protocolos para el relevo generacional en el sector comercial andaluz.
El objetivo de esta ‘Guía de relevo generacional en el sector comercial andaluz’ es poner a disposición de las empresas comerciales andaluzas, independientemente del
sector en el que se encuadren, su ubicación, tamaño o forma jurídica, un documento que establezca las bases necesarias para la elaboración de un protocolo que ayude a preparar y planificar el proceso de relevo generacional y que permita el traspaso con éxito de la empresa o el negocio. Es importante tener en cuenta que, al ser procesos a medida, es clave contar con un asesor especializado que acompañe el proceso y pueda ayudar con la formación de quienes vayan a tomar las riendas del negocio, o a plantear mecanismos para facilitar la salida de quien no quiera permanecer en el proyecto empresarial, en caso de sociedades familiares o compuestas por varios socios.
Integrando el Pasado y el Futuro
El relevo generacional en el sector comercial andaluz es esencial y precisa de los instrumentos adecuados para su impulso. El emprendimiento en este sector puede hacer posible la supervivencia de negocios valiosos que son seña de identidad y dotan de vida a nuestras ciudades y pueblos. Permitiendo la necesaria evolución de las empresas comerciales, integrando la experiencia con las nuevas ideas y las capacidades tecnológicas.
La colaboración intergeneracional no sólo preserva la herencia comercial, sino que también sienta las bases para un futuro innovador. Podemos y debemos emprender en negocios de toda la vida y ser innovadores al mismo tiempo, porque unir el talento joven con la experiencia es una fórmula ganadora para el comercio hoy. Apostemos por ello.
