La innovación y la tecnología emergen como solución a algunos de los desafíos más apremiantes de la gestión y escasez del agua
Es usted presidente de Corporación Tecnológica de Andalucía desde hace pocos meses. ¿Cuáles son las líneas maestras que quiere imprimirle a este organismo?
CTA es un clúster de innovación y un modelo de cooperación público-privada con una trayectoria de éxito en el impulso a la I+D+i empresarial. Por eso, para mí es un honor y un reto haber sido elegido presidente de esta fundación privada por su Patronato y tengo la intención de responder con entusiasmo y un alto grado de compromiso.
He encontrado en CTA un equipo de expertos en la gestión de la innovación con los que ya estoy trabajando para conseguir nuevas metas. Uno de mis objetivos prioritarios es reforzar la colaboración estrecha con la Junta de Andalucía para impulsar la innovación empresarial. Además, me gustaría que mi etapa como presidente suponga un nuevo impulso para crecer, en empresas miembro, en visibilidad y en presencia en toda Andalucía, refozando especialmente Málaga y la zona oriental. Por supuesto, entre mis objetivos está seguir incentivando proyectos de innovación de las empresas y ayudarles a desplegar estrategias de I+D+i rentables y exitosas; continuar creciendo como socio en proyectos internacionales de innovación, principalmente europeos y de mercado multilateral; y ayudar con nuestros servicios avanzados a empresas e instituciones innovadoras.
La innovación es la razón de ser de CTA. ¿Qué servicio se ofrece desde CTA a las empresas andaluzas?
CTA ayuda a las entidades innovadoras a acelerar su I+D+i y hacerlas rentables. Ayudamos a las empresas a planificar una estrategia de innovación, desde la identificación de sus necesidades de I+D+i a la formulación de los proyectos para resolverlas o la búsqueda de socios y la financiación necesaria para llevarlos a cabo, dentro de la que ofrecemos nuestro propio programa de incentivos con condiciones muy ventajosas. Además, proporcionamos una serie de servicios avanzados para ayudar a empresas, universidades, centros tecnológicos, Administración y otras entidades a transformar en riqueza y negocio los resultados conseguidos. Estos servicios incluyen desde apoyo en procesos de Compra Pública de Innovación para Administraciones y organismos públicos hasta apoyo en la captación de financiación para startups tecnológicas, pasando por servicios de transferencia para las Universidades y organismos de investigación o asesoramiento en la estrategia o la internacionalización de la I+D+i de las empresas.
¿Cuál cree que ha sido la evolución del sector empresarial andaluz en materia de innovación en estos últimos años?
El interés de las empresas por la innovación ha crecido exponencialmente. Cada vez son más conscientes de que no se trata de un gasto o un compromiso puntual, sino una inversión rentable a medio y largo plazo. Desarrollar proyectos innovadores a partir de una estrategia de I+D+i con visión a medio plazo y conectada a los objetivos generales del negocio se traduce en mejores armas para competir.
La tendencia reciente es positiva y Andalucía es la tercera comunidad española con mayor gasto en I+D en valores absolutos (con más de 1.700M€), pero la realidad es que la intensidad en I+D de Andalucía se sitúa todavía en el 1,06% del PIB, muy lejos de la media europea, superior al 2%, y de algunos de los países más desarrollados, que ya superan el 3%. Hay pisar el acelerador.
También es cierto que vivimos un buen momento para conseguirlo, con alicientes como la apuesta del Gobierno andaluz por la innovación, los fondos Next Generation EU y los importantes focos de innovación que hay en estos momentos en Andalucía en torno a sectores como el energético (con el hidrógeno verde como proyecto estrella), el aeroespacial (con la Agencia Espacial Española en Sevilla), el TIC (con un potente hub en torno a la IA en Granada), el agroalimentario (con el DIH Andalucía Agrotech) y un largo etcétera.
Y ¿hacia donde nos debe conducir el futuro por lo que se refiere a I+D+i?
La I+D+i encuentra soluciones a los grandes retos de la Humanidad, como la escasez de recursos, el envejecimiento y superpoblación del planeta o el cambio climático. Además, la I+D+i es una herramienta para que las empresas defiendan su hueco en el mercado y se adapten mejor a los continuos cambios porque les permite diferenciar sus productos y servicios, siendo más eficientes y sostenibles, diversificar y adaptarse a los saltos tecnológicos. Los vectores de innovación más potentes en la actualidad son las transformaciones digital y energética, pero continuamente aparecen nuevas tecnologías disruptivas que generan nuevas oportunidades. Ahora mismo, está en boca de todos las aplicaciones de la Inteligencia Artificial y cómo puede transformar las profesiones que conocemos hoy día en muy poco tiempo, pero llaman a la puerta también otras tecnologías transformadoras como la computación cuántica o la web 3.0.
La innovación es fundamental para la internacionalización de las empresas andaluzas, hay algunas muy consolidadas ya en el exterior, pero otras más pequeñas que necesitan un apoyo. ¿Cómo se actúa con ellas desde CTA?
La I+D+i es un pasaporte a la internacionalización. La innovación permite competir mejor en el mercado global porque es una vía de diferenciación. Además, la internacionalización de la propia estrategia de I+D+i puede convertirse en una llave a nuevos mercados, ya que permite conocer a potenciales socios, clientes y competidores desde una posición ventajosa. CTA ofrece servicios de apoyo a la estrategia de internacionalización de la I+D+i, con consultores especializados en programas internacionales y una gran experiencia en proyectos europeos, así como una amplia red de más de 450 contactos en 42 países.
Hace pocas fechas el Comité Ejecutivo de CTA ha aprobado la financiación de 4 nuevos proyectos de I+D+i que movilizarán una inversión privada cercana a 3,4 millones de euros. ¿En qué consisten estas líneas y a quien van dirigidas?
Los proyectos aprobados en el Comité Ejecutivo de abril avanzan en nuevas tecnologías fotovoltaicas para reducir el coste energético, Economía Circular aplicada a productos agroalimentarios y varios sistemas que aplican IA a gestión y mantenimiento predictivos. Pero esto no es más que una pequeña muestra de la I+D+i que moviliza nuestro programa de incentivos. Cada año, se celebran un total de 5 Comités Ejecutivos como este, que aprueban la financiación de nuevos proyectos empresariales de I+D+i en cooperación con grupos de investigación de universidades públicas y otros centros de investigación andaluces. Esto se traduce en transferencia de tecnología del mundo científico al mercado, en la mejora y desarrollo de nuevos productos y servicios, el lanzamiento de nuevas líneas de negocio, la mejora de la sostenibilidad y eficacia de las empresas y, en definitiva, un aumento de su competitividad. En los casi 18 años de existencia de CTA, ya hemos financiado 777 proyectos de I+D+i empresarial que han movilizado más de 565millones de euros y han subcontratado más de 376 grupos PAIDI por casi 100 millones de euros. El desarrollo y la comercialización de los nuevos productos y servicios que han resultado de los proyectos financiados por CTA han generado más de 1.500 millones de euros y 31.000 empleos para el período 2005-2022.
Estamos viviendo una situación complicada en torno al uso del agua tanto para consumo humano como para agricultura y ganadería. ¿Cómo puede ayudar en esto la innovación? Y ¿CTA tiene en marcha algún proyecto en este sentido?
Precisamente, organizamos el 14 de junio una jornada sobre “soluciones tecnológicas para la gestión del agua”. Sin duda, atravesamos un momento preocupante respecto a la disponibilidad de agua en Andalucía, con el agua embalsada por debajo del 27% de los embalses. Más allá de la preocupación puntual, es necesaria una gestión cada vez más eficiente del agua, un recurso escaso y esencial para la vida y la actividad empresarial. La innovación y la tecnología emergen como solución a algunos de los desafíos más apremiantes de la gestión y escasez del agua. Esta jornada ha sido oportunidad única para explorar las últimas tendencias, innovaciones y avances tecnológicos que están evolucionando el sector del agua de la mano de algunas de las empresas más destacadas en el ámbito de la gestión del agua, el tratamiento de aguas residuales y la aportación de tecnologías ambientales y soluciones digitales. Desde CTA, apoyamos con nuestro programa de incentivos proyectos de I+D+i enfocados a mejorar la gestión del ciclo integral del agua, participamos en proyectos europeos que avanzan en esta dirección y ponemos en contacto potenciales socios tecnológicos que puedan trabajar en este sentido.
Por ejemplo, el proyecto europeo EERES4WATER, financiado por el programa Interreg Espacio-Atlántico y con 11 socios de 5 países europeos entre los que se encuentra CTA, ha trabajado en la optimización de la gestión energética del ciclo del agua. Entre las tecnologías desarrolladas, se encuentra la creación de una aplicación software que predice los almacenamientos de agua, los requisitos de bombeo y variaciones en el tratamiento de aguas residuales. Además, se han desarrollado tecnologías sostenibles como la desalinización propulsada por energía de olas de bajo coste y sis- temas de bombeo impulsados por energía renovable. A su vez, se ha desarrollado un modelo de Inteligencia Artificial (IA) para predecir organismos indicadores fecales y detectar la mala calidad del agua en tiempo real.
Por otra parte, CTA participa en los grupos operativos SAMA y MONICA, financiados por la Asociación Europea de Innovación a través de la Consejería de Agricultura, que aplican IoT, inteligencia artificial e imágenes satelitales para desarrollar plataformas de agromonitorización que hagan más sostenibles diferentes cultivos (arroz y extensivos herbáceos) y ayuden a reducir el consumo de agua, entre otros aspectos.
