¿Cuál fue la motivación detrás de la creación de esta clínica y cómo se diferencia en el sector de la medicina estética avanzada?
La idea surgió hace muchos años cuando yo trabajaba en urgencias y veía la preocupación que tenían los pacientes por las secuelas estéticas que podían tener los diferentes tratamientos. Era una preocupación muy generalizada en los pacientes. Me di cuenta de que la medicina se basaba en mejorar la calidad de vida de las personas, y fue cuando me empecé a interesar por la medicina estética. Después de dos años de formación en Máster universitario y trabajando en grandes cadenas médico estéticas para coger experiencia, decidí montar la primera clínica Benzaquén.
Lo que nos diferencia es la calidad de los tratamientos. Ese es nuestro posicionamiento; la calidad. Apostamos por un equilibrio entre resultados visibles y a la vez naturales. Esto último es una de nuestras prioridades: que haya equilibrio entre conseguir mejoría y mantener la naturalidad para evitar lo que llamamos la “huella estética negativa”.
¿Podría destacarnos algunos de los tratamientos faciales o corporales más solicitados en esta clínica?
Ofrecemos toda la variedad de tratamientos de medicina estética, pero estamos muy focalizados en la medicina estética facial. En cuanto a los tratamientos más demandados, son los tratamientos en los que más experiencia y personalidad hemos puesto; tratamientos personales a los que llamamos medicina de autor. Centrándonos en los tres más demandados: el tratamiento de las arrugas de expresión; el dar soporte al tercio medio de la cara, para lo que tenemos una técnica específica con ácido hialurónico para dar soporte a los pómulos (Curvy Cheeks); y la tercera, que está muy demandada y es también exclusivamente nuestra, es una técnica de hilos para reposicionar el tercio inferior de la cara, levantando y redibujando la línea de la mandíbula con resultados mucho más notorios y duraderos (Lifting BQ).
Además, podemos presumir de tener muchos artículos científicos hablando y explicando la casuística sobre estas últimas técnicas.
¿Qué aspectos definen para esta clínica la belleza?, ¿cómo se trabaja para resaltar esta belleza natural de la que hablábamos anteriormente, la belleza natural de cada paciente a través de vuestros servicios y productos?
Nos basamos en, primero, hacer un estudio exhaustivo del paciente y también en escuchar, hacer una escucha activa.
Intentamos combinar las necesidades que nos transmite el paciente, con las que apreciamos nosotros, valorándolo previamente, y ayudándonos en algunos casos de inteligencia artificial.
Hay que tener claro qué es lo que queremos conseguir, cómo hay que hacerlo y qué técnicas disponibles llevar a cabo.
¿Cuáles son vuestros objetivos a largo plazo? es decir, ¿cuáles son las expectativas de la clínica de cara al futuro?
Hemos cerrado un acuerdo de colaboración con el grupo hospitalario Vitas en Málaga, para poder dar servicios en sus instalaciones. Este es uno de nuestros proyectos más destacados.
Otro muy importante es introducir cada vez más la necesidad de los estudios con ecografía en los pacientes, porque al final van a ser nuestros ojos internos para poder ver qué podemos hacer en el paciente y también, una vez hecho, poder asegurarnos si todo está colocado en el plano correcto.
Por lo tanto, nuestros objetivos estarían en potenciar nuestros servicios a nivel hospitalario; potenciar el uso de la ecografía para realizar los estudios; y estamos generando también una unidad llamada “longevidad saludable”, que busca retrasar u optimizar el envejecimiento a nivel interno (con técnicas como Sueroterapia, Cámara hiperbárica, Ozonoterpia,…).