Hace pocas fechas el ministro de transportes Óscar Puente ha anunciado una importante inversión para el puerto para acometer actuaciones pendientes con la finalización de la línea Algeciras-Bobadilla, el impulso de la autopista ferroviaria Algeciras-Zaragoza, y la mejora de los accesos al entorno portuario. ¿Qué supondría para el puerto y la zona de la bahía el poder contar con estas infraestructuras?
El ministro en febrero, durante su visita al Puerto de Algeciras, cuantificó en 1.775 millones de euros las infraestructuras pendientes para afianzarnos como puerta de entrada a Europa. Son proyectos muy necesarios para mejorar nuestra conectividad terrestre que llevamos reclamando décadas y no sólo beneficiarán al Puerto de Algeciras sino también al conjunto de Andalucía. Hablamos de la mejora de la Algeciras-Bobadilla, el desdoble del túnel del Acceso Norte al puerto, o la Autopista Ferroviaria Algeciras-Zaragoza. Según anunció el ministro Puente las obras están a punto de empezar y absorberán 468 millones de presupuesto para un proyecto estratégico para el transporte intermodal en España. En paralelo desde la Autoridad Portuaria trabajamos en el interior del recinto portuario y la denominada Última Milla para dar respuesta al aumento de tráfico ferroviario que traerá consigo la Autopista Ferroviaria y lograr de esta forma la sostenibilidad ambiental que reclama el transporte terrestre.
El ministerio también trabaja en los proyectos para la variante de Algeciras, crucial teniendo en cuenta que la A7 a su paso por Algeciras se ha convertido en una vía interurbana y, como reconocen en el ministerio, es una de las autovías nacionales con mayor volumen de tráfico del país.
Con todo, desde el Puerto de Algeciras lo que pedimos es que se ejecuten con urgencia porque así nos lo demandan nuestros clientes y usuarios.
El 1 de enero entró en vigor la normativa referente a las Emission Trading System (ETS). Usted ha alertado en varias ocasiones sobre las consecuencias negativas que podría tener para el puerto de Algeciras. ¿Han observado ya alguna disfunción en este sentido?
Sobre el ETS, desde el Puerto de Algeciras hemos venido advirtiendo desde 2021. Finalmente ha entrado en vigor con algunos cambios a la propuesta inicial, pero siguen siendo insuficientes. En este sentido lo que reclamamos a Bruselas los puertos euromediterráneos es que no perdamos competitividad frente a puertos de terceros países. Los puertos somos activos críticos y estratégicos y parte de la solución en el proceso de descarbonización del transporte marítimo. Respecto a Algeciras, no se es consciente de la joya que Europa tiene en el Sur.
Pero el pacto verde europeo exige que el sector marítimo reduzca al 55% sus emisiones en el 2030 y que alcance la neutralidad climática en el 2050. ¿Lo ve factible?
Es factible, claro que sí, no hablamos de no reducir emisiones, hablamos de que todos juguemos con las mismas reglas. Sin embargo, el ETS provoca paraísos de CO2, a la vez que genera perjuicios económicos a los puertos de transbordo, y pérdida de conectividad que otorga mayor control de nuestra cadena de suministro a puertos de terceros países a la Unión Europea. Sobre este tema también trasladé al ministro de Transportes la necesidad de dar un golpe de mano para desatascar este asunto que sin duda lastrará nuestra competitividad.
Independientemente del ETS, todo el sector portuario en general, y el Puerto de Algeciras en particular, trabaja desde hace años para reducir sus emisiones y partiendo de la base de que el marítimo es el medio de transporte más sostenible por tonelada transportada. Combustibles de transición como el LNG, alternativos como el hidrógeno verde, conexiones OPS para que los barcos se conecten a la red eléctrica cuando estén en puerto… el compromiso tanto de puertos como el de Algeciras, como de la empresa privada es absoluto para alcanzar los objetivos marcados y muestra de ello son las enormes inversiones que se están llevando a cabo en los puertos para garantizar un futuro sostenible.
En este punto también tenemos que hablar de Tarifa, donde estableceremos la primera línea marítima verde intercontinental entre los puertos de Tarifa y Tánger-Ciudad, iniciativa actualmente a concurso.
Los conflictos que ahora mismo se suceden en el mundo, sobre todo la Guerra en Oriente Próximo, afectan irremediablemente al tráfico marítimo. ¿Qué papel cree que debe jugar en este momento el Puerto de Algeciras?
Efectivamente el conflicto en la Franja de Gaza viene trastocando desde diciembre la logística marítima mundial que como sabemos, no puede parar porque el mundo se colapsaría ya que el 80% del comercio internacional se realiza por vía marítima. La alternativa a navegar por el Mar Rojo es la ruta del Cabo de Buena Esperanza, que como sabemos alarga los tránsitos en más de una semana, encarece el flete y genera más emisiones que hacerlo a través del Canal de Suez. La posición del Puerto de Algeciras en este caso sigue siendo privilegiada. El primer punto geográfico de Europa continental donde los barcos pueden realizar cualquier operación tras esa larga travesía -ya sea carga o descarga, repostaje de combustible, o reparaciones- es el Estrecho de Gibraltar y ahí el sector sabe de la amplia oferta y excelencia de los servicios que oferta el Puerto de Algeciras. Ya en los dos primeros meses del año hemos notado esta mayor afluencia de buques que necesitan algún servicio antes o después de bordear África.
Una vez hecho balance del año 2023. ¿Qué datos y conclusiones relevantes se pueden extraer? Y ¿qué previsiones manejan para este 2024?
En 2023 volvimos a superar por 8º año consecutivo los 100 millones de toneladas de actividad, lo que nos sitúa como cuartos de Europa sólo por detrás de los tres grandes puertos del norte del continente, Rotterdam, Amberes y Hamburgo. En lo que llevamos de 2024 los tráficos están creciendo, no obstante, los acontecimientos internacionales afectan sobre manera al transporte marítimo y es difícil predecir qué ocurrirá el resto del año. Mientras tanto el Puerto de Algeciras está preparado para seguir siendo una infraestructura estratégica que contribuya a normalizar las posibles disrupciones en las cadenas logísticas, conectando de forma directa con 200 puertos y 70 países de forma directa.
