¿Cuándo surge Avanza Formación?
Avanza se consolidó como empresa en el mes de octubre de 2008 y nació con el objetivo de abarcar un amplio espectro de servicios formativos, desde cursos de informática hasta cursos de formación para la Junta de Andalucía, así como la enseñanza de inglés y francés. Sin embargo, optamos por especializarnos en impartir clases de inglés para todos los niveles y todas las edades.
¿Qué valoración hacen de estos últimos años?
Los últimos años han sido, sin duda, años de cambios para el sector. Las academias con pizarras de tiza o de rotuladores han tenido que adaptarse, en la medida de lo posible, a la transformación digital. Ahora casi todo se hace de manera online y el apoyo en tecnologías es mucho mayor. En particular, ha sido una época rara para Avanza, puesto que digitalizarse en apenas 10 días es complicado. Además, decidimos cerrar por la pandemia, antes de que los propios colegios lo hicieran, y alargar el cierre por unos meses, aunque esto nos supusiese pérdidas económicas. Sopesamos que el coste emocional para los propios padres era muy alto, ya que también fue una época de incertidumbre y caos para las familias.
Asimismo, teniendo en cuenta los cambios de estos últimos años ¿implementaron clases online?
En Avanza ofrecemos una modalidad dual. Tras la pandemia, las condiciones de nuestras instalaciones nos permitieron impartir clases presenciales sin infringir las medidas postconfinamiento. Sin embargo, implantamos la posibilidad de acceso online a los cursos con el objetivo de que los alumnos que estuviesen confinados siguiesen las clases. He de señalar que por la amplitud de nuestras instalaciones, aunque tengan la posibilidad de dar las clases online, la gran mayoria opta por la presencial.
¿Cómo determinan el nivel de cada alumno que llega a Avanza Formación?
En primer lugar, realizamos una pequeña entrevista en la que solemos preguntarle al alumno, o a sus padres, si le gusta el inglés, qué le gusta hacer o qué tal las notas, entre otras cuestiones. Sobre todo, queremos saber si acuden a nosotros por obligación, por necesidad o por gusto. Posteriormente, realizamos pruebas de nivel para los niños más mayores, así como pruebas cognitivas y de pronunciación a los más pequeños.
Por último, ejecutamos un plan de estudio personalizado para cada alumno, en función de su nivel y sus objetivos. Tras enmarcar cada meta real alcanzable del alumnado, seguimos una metodología basada en la repetición de contenido, puesto que consideramos que solo así se consigue la excelencia. Asimismo, somos muy selectivos con los grupos y nunca formamos clases con más de 12 alumnos porque una cifra mayor va en detrimento de la calidad de la enseñanza.
Para concluir, ¿cuáles van a ser las líneas de trabajo en las que se van a centrar en los próximos meses?
Una vez que finalicen el curso, analizaremos si se han cumplido los objetivos marcados o si se han superado expectativas, y trabajaremos en todo aquello que estimemos que requiere alguna mejora. Por otro lado, nos gustaría seguir innovando, tanto en materia tecnológica como a lo que se refiere a certificados nuevos. En general, queremos poder seguir haciendo lo que llevamos casi 15 años llevando a cabo.
