Desde los mercados tradicionales en los que se respira la autenticidad de la región hasta las innovadoras tiendas que reflejan la modernidad, el comercio en Andalucía muestra la diversidad cultural y tradición histórica. Este panorama comercial no solo enriquece la oferta sino que también presenta desafíos y oportunidades en la búsqueda de un equilibrio sostenible entre los distintos formatos comerciales. Desde el Gobierno andaluz existe el firme compromiso por la apuesta del sector y es por ello, que desde la Dirección General de Comercio, asumimos el gran reto que tenemos por delante, sólo trabajando en el mismo sentido, sector público y privado, saldremos más fuertes y reforzados de la situación que atraviesa el sector comercial actualmente.
En el caso de Andalucía, la cifra de negocios venía creciendo hasta el año 2019 en términos promedios a razón de un 2,4% anual, si bien esta tendencia se rompe en 2020, cuando las ventas registran una caída del 7,1%. Posteriormente, la recuperación del año 2021 (+2,5%) no presentaba signos de continuidad, de hecho, volvió a experimentarse en 2022 una nueva reducción interanual del -1,2%.
Dentro del ámbito comercial, es la actividad al por menor la que experimenta una dinámica más desfavorable, pues en los últimos 5 años se han perdido 3.655 empresas y aproximadamente 4.000 establecimientos comerciales. Por tanto el balance del año para el sector es complicado, debido a la difícil situación mundial por la que está atravesando la economía y que está afectando directamente al consumo, pese a ello, hay atisbos de recuperación y de mejora en el sector.
Es en este contexto y en virtud de la importancia que tiene este sector en nuestra economía, por su contribución a la generación de empleo y riqueza, la cohesión territorial y la sostenibilidad; la Consejería de Empleo, Empresa y Trabajo Autónomo, acaba de aprobar y publicar el VII Plan Integral de Fomento del Comercio Interior de Andalucía 2023-2026, un plan ambicioso, dotado con casi 93 millones de euros (92,8) con el que se pretenden conseguir dos objetivos: la puesta en valor del sector comercial y el impulso de la competitividad.
Se trata de un instrumento de planificación estratégica que está encaminado a implementar el nuevo modelo comercial que surge tras la pandemia del Covid 19, caracterizado por el auge del comercio on line, la necesaria digitalización de los comercios, las nuevas formas de relacionarse y de consumir de las personas, la modificación de los hábitos de compra y la creciente globalización de los mercados.
En el mismo, se fijan estrategias como la digitalización, innovación, sostenibilidad ambiental, nuevos hábitos de consumo, eficiencia energética, transparencia, estabilidad y adaptabilidad, principios claves para asegurar una política comercial robusta y beneficiosa para un desarrollo económico y social sostenible del comercio andaluz.
Por todos es conocido que, el comercio electrónico, es una modalidad de consumo que ha venido para quedarse y que se incrementará en los próximos años. En la actualidad, las tecnologías de la información y la comunicación han jugado y juegan un papel esencial, en la medida en que han permitido orientar los negocios hacia lo digital. La penetración de internet y el boom del e-Commerce, han provocado que los comercios físicos tengan que competir con las tiendas online, que no sólo están siempre abiertas, sino que además pueden ofrecer un stock más amplio y a un precio más competitivo. La transformación digital es una nueva forma de entender el comercio, que va más allá de la introducción de la tecnología y el uso de herramientas digitales en la empresa. Hace referencia a adaptar los procesos empresariales, crear una nueva cultura organizativa más innovadora y un nuevo modelo de hacer las cosas para tratar de aprovechar las nuevas oportunidades que ofrece el actual contexto digital.
Con la intención de adaptarse al mismo, en 2023, desde la Dirección General de Comercio se han resuelto incentivos por valor de dieciséis millones de euros, dirigidos a las pymes comerciales andaluzas y a las asociaciones para la transformación digital de los negocios dentro del Programa de Modernización del Comercio: Fondo Tecnológico, en el Marco del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por la Unión Europea-Next Generation UE-.
Atravesamos momentos complicados y por eso, en la medida de nuestras competencias, y a lo largo de la vigencia del Plan, los comercios van a seguir contando con nuestro apoyo a través de diferentes programas de ayudas específicamente diseñados para abordar las principales exigencias para el desarrollo del sector desde una triple vertiente: la de las empresas, la de las asociaciones representativas del comercio y la de los ayuntamientos; y con tres objetivos claros: la modernización, innovación y sostenibilidad como motores de transformación de todo comercio que pretenda mejorar, crecer y, desde luego, pervivir en el tiempo.
Esta transición no debe suponer en ningún caso que el comercio andaluz pierda su esencia, las señas de identidad que lo hacen único. Es ahora cuando comerciantes y administraciones públicas debemos tomar conciencia, en estos momentos difíciles, de la importancia de la colaboración y de cooperación para convertir al comercio andaluz en el comercio de hoy y del futuro y seamos capaces, juntos, de lograr lo que la sociedad demanda: un comercio próximo, profesional y rentable.
