“La historia de Llopis Servicios Ambientales, es la historia de Sevilla, dado que el crecimiento de la ciudad siempre ha redundado en el crecimiento de nuestra empresa”
Se acaba de aprobar en el Parlamento de Andalucía la Ley de economía circular. ¿Qué cree que va a aportar esto a la sostenibilidad en nuestra región?
Oportunidades en muchos sentidos. Para empezar un escenario normativo que ayuda al tejido empresarial de Andalucía en la adaptación al nuevo paradigma de la producción. No podemos retrasar más la transición hacia la economía circular y abandonar esa linealidad que produce tanto derroche, y ahora, con el apoyo de las instituciones no tenemos excusa. Sin duda, el objetivo prioritario de esta nueva norma es minimizar el impacto medioambiental que las empresas producimos con nuestra actividad, de modo que, legislar con medidas del tipo: establecer el principio de jerarquía de los residuos, crear una oficina andaluza de economía circular, poner en marcha el Registro público andaluz de análisis del ciclo de vida de los productos y servicios, fomentar el ecodiseño en el sector de la construcción y respaldar la utilización de prendas ecofriendly en el sector textil, entre otras, se hacía necesario.
Este texto supone un reto para las empresas a la vez que ejerce un papel determinante en el crecimiento de nuestra región, proyectándonos a nivel nacional como pioneros e impulsores del cambio en el sistema de producción, un cambio, que para los gestores de residuos no supone una novedad, puesto que la economía circular forma parte de nuestro ADN. Celebramos este gran paso, por supuesto, pero sin olvidar todo el trabajo que queda por hacer.
El grupo Llopis plantea la gestión medioambiental como algo integral que tiene que aplicarse a todos los aspectos de la vida. Soluciones verdes para problemas grises dicen ustedes.
El enfoque integral de la gestión medioambiental es una perspectiva valiosa y relevante en la búsqueda de soluciones sostenibles. Nos gusta ver en el verde Llopis la esperanza que este color representa, por tanto, el eslogan “soluciones verdes a problemas grises” implica encontrar formas innovadoras y sostenibles de abordar los desafíos ambientales, incluso en situaciones complejas o ambiguas. Esto supone buscar alternativas que sean beneficiosas tanto para el medio ambiente como para la sociedad en general. Se busca abordar los problemas ambientales desde una perspectiva global, considerando tanto los impactos directos como los indirectos de nuestras acciones.
Es, nada más y nada menos, lo que ofrecemos a nuestros clientes. De esta forma, podremos avanzar hacia un futuro más equilibrado y respetuoso con el medio ambiente.
Su grupo tiene una trayectoria de casi 50 años y en estos últimos ha sufrido una gran transformación de imagen y de concepto. ¿Cómo se ha fraguado esta nueva estrategia empresarial?
El crecimiento de Llopis ha sido orgánico desde sus inicios. Trabajamos con la visión puesta en el futuro dando curso a nuevos proyectos que enriquecen el valor añadido de nuestros servicios, pero tenemos que reconocer que nuestra cartera de clientes también nos ha ayudado mucho.
Recientemente, hemos puesto en marcha tres nuevas líneas de negocio: consultoría ambiental, un nuevo servicio de formación a empresas y el sello de calidad ‘Objetivo Cero Residuo’ que hemos desarrollado en colaboración con la Cámara de Comercio de Sevilla como entidad certificadora.
El desarrollo y la profesionalización de estos nuevos servicios ha surgido gracias a clientes que, en su afán de mejorar y hacer crecer sus negocios, de forma proactiva, han requerido ir de nuestra mano para dar un paso más en el ámbito de la sostenibilidad.
Por otro lado, el marco legislativo con el que hemos arrancado 2023 también ha tenido algo que ver; como explicaba en la primera pregunta, el ámbito normativo cada vez es más exigente y eso hace que las empresas necesiten un segundo departamento de calidad y medio ambiente que les asesoren y acompañen en la implementación de la nueva praxis operativa de sus negocios.
Su planta principal está ubicada en el Puerto de Sevilla. ¿Cuál es su vinculación con Sevilla, con el Puerto y sobre todo por qué han decidido estar en este espacio?
Nuestros 14.000 metros cuadros de planta de tratamiento de residuos es la única presente en la ciudad de Sevilla, lo cual nos convierte en el aliado perfecto de aquellas empresas productoras que generan un gran volumen de residuos y es que, ser sostenibles engloba un amplio abanico de posibilidades, entre ellas los desplazamientos. Acortar las distancias entre el punto de producción y el destino del residuo, supone reducir la huella de carbono minimizando la emisión de gases contaminantes.
Nuestra apuesta por emplazarnos en el Puerto de Sevilla ha sido el enclave estratégico que siempre ha representado en nuestra ciudad, así como nuestra condición de gestores autorizados en estas instalaciones. Desde 2010 somos el punto limpio del puerto y, por ende, los responsables de gestionar el residuo generado en las 850 hectáreas que éste ocupa.
Respecto a nuestra vinculación con Sevilla…podría decirte que las cubas Llopis llevan casi medio siglo siendo parte del mobiliario de la ciudad recogiendo los residuos generados en proyectos tan emblemáticos como la Expo´92, la construcción del puente del V Centenario, la conversión del Hospital de las Cinco Llagas en sede parlamentaria, la construcción del AVE, el desarrollo del nuevo parque hotelero Sevillano de los 80´s y la remodelación del Hotel Alfonso XIII.
Podríamos decir que la historia de Llopis Servicios Ambientales, es la historia de Sevilla, dado que el crecimiento de la ciudad siempre ha redundado en el crecimiento de nuestra empresa.
Hay muchas personas que piensan que la sostenibilidad es reciclar y poco más y otros muchos que creen que reciclar no merece la pena. ¿Qué les diría?
Hace poco publicamos en nuestro eco- blog un post que hacía referencia al ‘para qué reciclamos’. Y llegamos a la conclusión de que reciclar, es la única manera de mejorar la calidad de nuestro ecosistema.
Es normal que surjan pensamientos similares al que haces referencia con tu pregunta. Y es que, el camino que recorren estos residuos desde que son depositados en contenedores urbanos y puntos limpios hasta que comienzan su proceso de valorización, es desconocido por la gran mayoría. E igualmente sucede con las grandes industrias productoras.
Sin educación no hay información y sin información no hay conocimiento. En este sentido hemos estado limitados con la información, nos han enseñado a clasificar los residuos en casa para luego reciclarlos, pero ¿dónde se recicla?, ¿cómo se hace?, ¿cuáles son los pasos a seguir? Y si queremos ser parte activa de la economía circular ¿cómo identifico cuando voy a comprar que un producto es reciclado?
A todas estas cuestiones intentamos dar respuesta en los Business Breakfast que organizamos cada mes en nuestras instalaciones. Invitamos a empresas, resolvemos todas estas cuestiones y les enseñamos los procesos en nuestra planta de tratamiento de residuos. Todos se sorprenden y, me atrevería a decir, que se van conmovidos.
El reciclaje se ha convertido en una herramienta vital en la lucha contra el cambio climático y la preservación de nuestros recursos naturales, por tanto, la sensibilización medioambiental es tarea de todos, y su objetivo: minimizar la cuota de residuos depositados en vertederos.