Ha sido reelegido presidente de LANDALUZ, el Clúster Agroalimentario de Andalucía. Nueva legislatura y nuevos proyectos a la vista, ¿de qué situación parte la asociación para afrontar estos nuevos cuatro años?
LANDALUZ lleva, desde la última década, un camino muy ascendente en cuanto a servicios dirigidos a las empresas asociadas. En la actualidad, cada vez son más las empresas que forman parte de la asociación y cada una demanda un tipo de servicio. Durante esta década, hemos afianzado las relaciones con la distribución organizada, incrementando el número de acciones al año y de referencias participantes en las mismas, así como los ámbitos geográficos, desarrollando promociones en cadenas provinciales, regionales y nacionales. Además, hemos potenciado la expansión internacional de las empresas participando cada vez en más ferias y abriendo nuevas oportunidades de negocio para nuestras empresas en distintos mercados del mundo. Por último, el programa gastronómico de Andalucía Cocina es una de las principales plataformas regionales para la promoción de nuestros alimentos y de nuestra hostelería a través de la gastronomía y Andaluces Compartiendo se ha estabilizado como uno de los principales proyectos de Responsabilidad Social Empresarial de Andalucía con la colaboración desinteresada de más de 50 empresas de nuestra región. Además de todo ello, hemos consolidado nuestra posición como organización representativa del sector agroindustrial en Andalucía y en España llevando a cabo una defensa permanente de los intereses del sector y de nuestras empresas mediante la interlocución con todas las Administraciones, especialmente con la Consejería de Agricultura de la Junta de Andalucía.
Esta es la actualidad y, ¿cuáles son los próximos retos que se plantea al frente de la asociación en esta nueva legislatura?
La verdad es que los retos que nos planteamos como la principal asociación de la industria agroalimentaria de Andalucía son bastante ilusionantes. Partimos, como decía, de una situación bastante afianzada y más aun teniendo en cuenta lo vivido durante los últimos años. Hemos pasado por una pandemia, huelga de transportes, incremento de costes, sequía y un largo etcétera que no nos ha permitido trabajar con la estabilidad que necesita una industria como la agroalimentaria. Esto no ha impedido convertir a LANDALUZ en un colaborador muy importante para las empresas de nuestro sector en estos tiempos convulsos para impulsarlas a buscar nuevos mercados y nuevas oportunidades. En cuanto a cuáles son los próximos retos, estos pasarán por mantener toda la cartera de servicios que venimos ofreciendo hasta el momento e incluir una serie de valores muy importantes basados en la innovación, la formación y la calidad.
Desde LANDALUZ estamos convencidos que la innovación es un elemento fundamental para el desarrollo de nuestro tejido empresarial, así como para la mejora de la competitividad de nuestros procesos productivos. Por este motivo, desde la asociación hemos dado un paso adelante para configurarnos como el primer clúster agroalimentario multisectorial de Andalucía. Esto nos va a permitir poner en marcha multitud de acciones innovadoras que permitan, como decía anteriormente, mejorar el rendimiento de nuestras empresas consiguiendo así mejorar la competitividad de las mismas en un mercado cada vez más complicado. Además, mejoraremos el impacto medioambiental en nuestro entorno, la digitalización y otra serie de indicadores que harán de la industria agroalimentaria andaluza un referente a nivel nacional e internacional.
¿Hablamos de mejorar un sector que ya de por sí es líder?
Sí, es líder y locomotora económica en Andalucía y en España, pero estos sectores corren el riesgo de sufrir por inmovilismo. Nos encontramos en un mercado global, donde todo avanza de forma vertiginosa y en esa línea, las empresas debemos ir de la mano de nuestra realidad. Necesitamos, y así lo venimos demandando desde siempre, estabilidad para poder mejorar, y en base a esta estabilidad y seguridad debemos impulsar a las empresas a seguir creciendo, a ser más sostenibles, rentables, innovadoras y competitivas. Sin duda, estos son ingredientes de una receta que harán que la agroindustria andaluza siga siendo la industria tractora de nuestra economía y la que articula una parte importante del desarrollo rural de Andalucía.
Señalaba antes la importancia del mercado exterior, ¿qué importancia tiene en el desarrollo del sector?
Decía que no debemos caer en el inmovilismo a nivel de producción, y esto responde también a esta pregunta. Existen multitud de mercados en el exterior que debemos investigar y ver la acogida que nuestros alimentos pueden tener en ellos. Para ello, desde la asociación, venimos desarrollando un trabajo muy intenso visitando multitud de ferias en los cinco continentes, organizando agendas comerciales, comercializando de manera consolidada, etc. Hay que tener en cuenta que, a día de hoy, Andalucía es el principal exportador en materia de alimentación de España y contamos con una balanza comercial positiva, lo que nos sitúa en un escenario privilegiado. Y por este motivo, como decía al principio de la pregunta, no debemos caer en el conformismo de haber hecho las cosas bien, sino que debemos seguir impulsando a las empresas de nuestro sector a seguir creciendo, sumando experiencias fuera de nuestras fronteras. Esta forma de entender los mercados internacionales fue palanca en la anterior crisis, cuando la exportación se convirtió en uno de los principales salvavidas para empresas que habían sufrido una gran caída en el mercado nacional. Para ello, será fundamental contar con una política de apoyo sectorial en el seno de Andalucía TRADE.
Es interesante lo que comentas de seguir creciendo en un sector líder, para eso hace falta contar con grandes compañeros de viaje.
En este punto es fundamental trabajar con conceptos como la colaboración público-privada, pero bien entendida. Me refiero a trabajar codo con codo con las administraciones públicas para crecer de forma conjunta. Realmente, es el tejido empresarial el que crea economía y la dinamiza, y para eso es fundamental tener al lado a una administración que sea eficaz y que impulse este crecimiento. En este caso, me gustaría señalar lo que comentaba antes, y es que no debemos caer en el conformismo a ningún nivel, ni a nivel de exigencia propia en las empresas ni en esta colaboración público-privada a la que hacía referencia. Desde LANDALUZ siempre hemos tenido una máxima que no es otra que seguir mejorando, seguir impulsando a nuestras empresas a que alcancen cotas de éxito que hace escasos años ni se planteaban. Y este seguirá siendo uno de los grandes retos de la asociación con el paso de los años, no conformarnos con lo que hagamos y siempre aspirar a tener una industria más potente y competitiva que genere aún más riqueza y empleo de calidad en Andalucía.
