“Trabajar de la mano, triangulando entre la Junta de Andalucía, que tiene las competencias de universidades y empleo, y la UCA, es prioritario”
Es la segunda vez que el Partido Popular consigue situarse al frente de la Diputación de Cádiz. ¿En qué van a cambiar las políticas provinciales a partir de ahora?
Siempre que hay un cambio de gobierno es porque la ciudadanía demanda una nueva manera de hacer las cosas y mejores resultados. Ése es nuestro reto. Pensamos que una entidad como la Diputación, con todo su potencial, puede tener un mayor protagonismo como transformador económico y social de toda la provincia, aplicando nuestro modelo, en el que creemos firmemente, basado en la eficacia y el aprovechamiento máximo de los fondos públicos. Y para eso vamos a trabajar. Para hacer políticas en torno a un objetivo claro: construir una Diputación de Cádiz que el ciudadano perciba como suya, cercana y útil.
La Junta de Andalucía, los Ayuntamientos de las capitales de provincia y de algunas de las ciudades más importantes y seis de las ocho diputaciones provinciales también están en manos de su partido. ¿Cree que esto va a facilitar su labor de gobierno?
Tiene lógica pensar que es más fácil llegar a acuerdos con instituciones que están gobernadas por el mismo partido, porque tienen una manera común de entender la gestión de lo público. Pero la realidad es que mi intención como presidenta de la Diputación de Cádiz es la de gobernar para todos, tender la mano y mantener una colaboración fluida y leal con todas las administraciones. Creo firmemente en el diálogo como herramienta política y la provincia está en un momento crucial, en el que nos jugamos mucho y la Institución debe estar por encima de intereses partidistas, solo al servicio del bien común. Y para eso hay que entenderse con todo el mundo. Queremos una Diputación que gobierne en beneficio de toda la provincia, con independencia del color político de cada institución. Porque detrás de cada una de ellas están los vecinos y vecinas y es a ellos a quienes nos debemos, voten a quien voten.
Usted ya ha puesto el foco en la formación anunciando que va a establecer alianzas con la Junta de Andalucía y la Universidad. ¿Este es el principal problema de Cádiz? ¿Cómo quiere enfocar estos acuerdos para formación?
La provincia afronta retos de primera magnitud en estos años, que pueden marcar el futuro a corto y medio plazo, y entre ellos, destaca como principal desafío combatir las altas tasas de desempleo que se siguen registrando. Será una prioridad absoluta en nuestra línea de acción, y para conseguirlo es imprescindible fortalecer una de las patas que sostiene nuestra competitividad en el exigente mercado laboral: la formación, y en especial, la formación de mayor cualificación, que es la que ofrece la Universidad.
Una universidad potente es una fuente de riqueza y motor de progreso desde numerosos puntos de vista. Por ello vuelvo a lo del diálogo que decía antes. Trabajar de la mano, triangulando entre la Junta de Andalucía, que tiene las competencias de universidades y empleo, y la UCA, es prioritario, está en nuestra agenda de trabajo y lo fomentaremos en la medida de nuestras posibilidades.
Mencionó usted en su discurso de investidura la necesidad de mejorar la financiación de las entidades locales autónomas. Este tema es recurren- te, pero parece que no se le encuentra una solución. ¿Cuál es su idea en este sentido?
Una de las principales razones de ser de la Diputación de Cádiz es garantizar la igualdad de derechos y de acceso a los servicios de los ciudadanos con independencia de que vivan en una gran ciudad, en un municipio pequeño, o en áreas rurales de entidades locales o pedanías. No podemos tener ciudadanos de primera y de segunda y por eso creemos que tenemos que favorecer que quienes viven en una ELA dispongan de los servicios básicos y se tenga en cuenta sus necesidades y singularidades, del mismo modo que se hace con quienes viven en una ciudad grande. Y eso no se puede hacer sin una adecuada financiación.
Es un tema que necesita reflexión y valentía para darle una solución y lo que tenemos claro desde la Diputación es que en los próximos 4 años estos núcleos de población, que en ocasiones tienen más habitantes que muchos municipios, van a estar en el foco de nuestra acción de Gobierno y van a beneficiarse de nuestros programas.
Ya hay quien dice que Cádiz está a punto de morir de éxito en materia turística. ¿Usted lo cree? ¿Cree que es necesaria una regulación para evitar la concentración en zonas muy concretas de la provincia?
Tenemos una provincia de una diversidad y riqueza paisajística y monumental, que, sumadas al atractivo de sus costas, nos con- vierten en una potencia turística de primer orden. Cádiz enamora y en consecuencia el turismo bate récords año tras año. El reto ahora poder seguir creciendo sin que se pierdan por saturación los encantos que nos hacen especiales, como está pasando en otros lugares icónicos del mundo, donde la masificación está siendo inasumible para los ciudadanos. Creo que no es nuestro caso.
No estamos a punto de morir de éxito, aún queda margen, pero sí que será imprescindible trabajar de la mano de todo el sector para desarrollar una estrategia, en un mercado super competitivo, que atraiga turismo de calidad y que sea respetuosa con el Medio Ambiente y con las necesidades de los gaditanos y gaditanas que viven aquí todo el año. De esa reflexión común saldrán las conclusiones de si es necesario desarrollar normativas en zonas de especial afluencia. Y si es así, cómo y en qué momento, implantarlas. Por otro lado, las nuevas tecnologías y la inteligencia artificial nos abren nuevas posibilidades y tenemos que trabajar duro para aprovecharlas. Es importante además que no caigamos en la demagogia de demonizar el turismo que, no olvidemos que, en el caso de Cádiz, genera uno de cada tres euros de nuestro producto interior bruto.
