La última década nos ha acostumbrado a discursos épicos sobre transición energética, energías renovables y sostenibilidad. Pero en la práctica, el despliegue y la ambición han chocado con shocks externos, saturación de mercado y malas prácticas que han llevado a muchos actores a desaparecer antes incluso de despegar. Una pequeña empresa de Cádiz, por ejemplo, difícilmente habría anticipado que la geopolítica — con sus guerras y el uso de la energía como arma de suministro — afectaría de manera tan directa su operación, provocando escasez de aprovisionamiento, de suministro y una oscilación de precios que desestabiliza e inviabiliza cualquier planificación.
La volatilidad parece haberse convertido en la eterna compañera del mercado, y naturalmente condiciona la manera en que nos movemos. Pero esa misma realidad ha actuado como catalizador, impulsando la consolidación de alternativas energéticas que permiten a las empresas salirse de las reglas de los mercados convencionales y conseguir una mayor estabilidad, con energía solar. En este proceso se han distinguido las empresas y los profesionales capaces de ejecutar con eficacia y adaptabilidad, responder al presente y, al mismo tiempo, anticipar y construir el futuro.
Quantica, empresa a la que recientemente me he incorporado, es una de las organizaciones que han tenido esa visión y desde el sector fotovoltaico ha ayudado a muchos clientes a recorrer ese camino saliendo además reforzada en ese contexto. Empresa andaluza, con proyección y respaldo internacional, combina ingeniería, innovación y el pragmatismo necesario para identificar las prioridades de las empresas —económicas, de seguridad y medioambientales—, al mismo tiempo que suma la ambición y la valentía de ofrecer más de lo que se espera de un proveedor integral de soluciones solares.
Una de las riquezas y complejidades del mercado solar español es la pluralidad de Comunidades Autónomas, cada una avanzando a su propia velocidad, con industrias diferenciadas, diversidad de climas, y, por supuesto, sus respectivos gobiernos autonómicos, aunque todos se alineen con la hoja de ruta y la normativa del Gobierno central bajo el paraguas europeo. Esta heterogeneidad se integra en el ADN de Quantica, con los años de experiencia de que disponemos, la llegada plena a todos los territorios y una cartera de clientes totalmente diversificada, conocedores al detalle de cada territorio y sus particularidades.
Las ayudas sí llegan a Andalucía
Si bajamos la mirada al sur, hoy la Junta de Andalucía parece estar de nuestro lado, favoreciendo a un entorno propicio para la inversión, impulsando la innovación de los que nos dedicamos a las renovables y facilitando que las empresas de la región mejoren su competitividad y ahora, además, puedan convertirse en agentes activos del sistema energético.
Las buenas noticias no han sido pocas. Este pasado octubre, la Junta de Andalucía abrió el plazo para que los sectores industriales estratégicos puedan acceder a 109 millones de euros en incentivos, destinados a reforzar sus cadenas de valor. Se ha hecho pensando en las microempresas, pymes y grandes compañías de 19 sectores que van desde la química, metalurgia o automoción, el textil, papel o joyería, hasta la digitalización, aeroespacial o plástico sostenible. El programa se articula en dos líneas complementarias. La primera, enfocada en el desarrollo competitivo, financia la adquisición de activos, la ampliación de capacidad, la diversificación de la producción y la transformación de procesos. La segunda línea se centra en eficiencia energética y uso de energías renovables. Aquí es donde brilla la solar. Con un presupuesto de 83,6 millones de euros, incluye desde la mejora de edificios industriales y procesos productivos hasta la instalación de sistemas de autoconsumo solar, con incentivos que pueden alcanzar hasta el 65% de la inversión, además de facilidades de pago anticipado y parcial para acelerar la ejecución.
Un 65% de incentivo no es cualquier cosa, marca la diferencia entre querer y hacer. Pero eso no es todo. En noviembre se sumó un nuevo paquete de 44,65 millones con foco en la cadena agroalimentaria, complementando las líneas anteriores y reforzando un marco integral de apoyo a un sector estratégico para Andalucía. Lo que estamos viendo es que estas medidas se están poniendo al servicio de las empresas, posicionando a Andalucía como un hub industrial moderno y resiliente, capaz de situarse a la altura y liderar en el nuevo escenario europeo.
Con los colaboradores adecuados y estas ayudas sobre la mesa, podríamos estar ante un auténtico florecimiento del autoconsumo solar en los próximos años. En Quantica estamos completamente preparados, con más de 50 millones de euros movilizados a las espaldas. Nuestra tierra cuenta con todas las piezas del puzle: recursos naturales, posicionamiento logístico, músculo empresarial, un ecosistema de innovación extraordinario y colaboración pública. Pero nada de esto será suficiente sin talento comprometido. Lo que necesitamos ahora son profesionales capaces, proyectos tractores, realismo geopolítico y continuo desarrollo. Nosotros lo estamos viendo en soluciones avanzadas como el mantenimiento predictivo, la electrificación transversal de las empresas, la gestión energética inteligente y la IA aplicada.
