¿Qué percepción tiene el Colegio Oficial de Titulados Mercantiles y Empresariales de Santa Cruz de Tenerife respecto a la situación que tenemos y que se viene?
Para ser estrictamente sinceros, tenemos una excesiva carga administrativa con temas de subvenciones, nueva normativa, aplazamientos, fraccionamientos. Todos los días tenemos algún tipo de novedad adicional, es un poco caos. Por suerte, estamos acostumbrados a estar estudiando constantemente y a ir unidos de formación para tratar de paliar todo esto y que se haga algo más fácil.
Como somos una corporación de derecho público también tenemos que dar a la sociedad la utilidad que se nos requiere cuando se solicita.
Estamos en medio de los efectos que ha dejado la crisis económica y sanitaria. Canarias, por su dependencia del turismo, tardarán más en recuperarse. Bajo su punto de vista, ¿lo tienen muy complicado las empresas canarias para lo que queda de 2021 y 2022?
Es cierto que, por suerte, la vacunación va haciendo efecto y ya estamos viendo aspectos positivos como que numerosos países admiten a España como destino turístico seguro, el segundo paso es que nosotros estemos preparados para recibir a sus turistas.
Actualmente estamos en una economía en la cual se han recibido ayudas por parte de las distintas administraciones y creemos que la economía no ha sido mermada hasta que se empiecen a devolver estos préstamos en forma de capital. Esperemos que el turismo llegue y que la economía canaria se vea muy bien recompensada.
¿Son optimistas o pesimistas frente a lo que se viene?
Siempre hay que ser optimistas, si somos pesimistas ya tenemos dos escenarios en contra, afrontar los problemas con una sonrisa siempre tendrá mejor resultado.
¿Creen ustedes que las ayudas que se han ofrecido desde las distintas instituciones y las que están por venir son suficientes, o al menos son el impulso, que necesita la empresa canaria para seguir adelante?
Sí, está claro que para dar una solvencia y liquidez las ayudas siempre son bien recibidas, lástimas que para algunas sea demasiado tarde y para otras no ha habido una respuesta. También destacar que faltan muchas otras cosas para que las empresas puedan sobrevivir, por ejemplo, derivado del covid hay un montón de incertidumbre en lo que a nuestro Régimen Económico y Fiscal se refiere, que aún no han sido resueltas y que tenemos que luchar para que se resuelva normativamente y así evitar problemas en el futuro. Es urgente resolver las dudas del REF, si no, seguiremos en una incertidumbre absoluta.
¿Se han cumplido las líneas de trabajo que se marcó durante el año pasado como Decano?
El año pasado comentábamos que partíamos de cuatro patas y todas han sido llevadas a cabo, no por culpa mía, porque por suerte tenemos un grupo de 16 personas en la junta de gobierno, más la secretaria y otros colaboradores que quieren hacer una mejor profesión, un mejor Colegio y avanzar hacia el futuro que tenemos.
En ese instante éramos un Colegio de asesores contables y fiscales pero el mundo iba dirigido a otras cosas, nosotros tenemos que acercarnos a esa otras cosas, como son la digitalización, el marketing, las nuevas tecnologías, sin perder de vista todo lo bueno que hemos hecho hasta ahora y que seguimos haciendo, fomentando otras áreas formativas, focalizando esfuerzos en la vida universitaria.
Me gustaría destacar que hemos hecho un esfuerzo en un reciente convenio con la ULL que ya está dando sus frutos, tanto para la universidad como nosotros. Hemos creado un programa que se denomina COTIME UNIVERSITAS, consiste en la aceptación y mentorización de alumnos universitarios en la vida colegial, con formación específica y disfrutando de los convenios y beneficios de un colegiado.
“Hemos dado un paso más allá, no sólo para ser más visibles, sino también para ser más atractivos al resto”
Usted hizo hincapié en que la formación constante para sus colegiados era un valor a seguir, ¿seguirá siendo la labor formativa uno de los palos fundamentales de la actividad?
Sí, básicamente vivimos obsesionados con la mejora constante y continua, siempre hay que ir evolucionando ya que estamos ante un mundo tan cambiante. Se ha denotado tras el covid, en un año ha cambiado más normativa que en 10 años anteriores y tenemos que estar preparados para ello. Hemos elegido una serie de profesiones que necesitan formación continua para adaptarse a este tipo de cambios, sino quedaríamos en desuso.
¿Se ha pasado también a la digitalización y modernización de la gestión del colegio?
Sí, ahora tenemos a una persona externa contratada que se encarga de la imagen, la presentación de los cursos, tenemos incluso un video previo a los cursos online, con una melodía exclusiva del colectivo, enviamos newsletter con la formación que vamos a tener en ese mes en concreto.
Hemos dado un paso más allá, no sólo para ser más visibles, sino también para ser más atractivos al resto.
¿Planes, proyectos?
Seguir trabajando en la misma línea que hasta ahora, que será difícil porque el listón está muy alto y estamos todos sobrepasados de trabajo. Lo difícil no es llegar, sino mantenerse, es una realidad que trataremos de llevar a cabo.
Destacar la labor de todas estas personas que comentaba, labor de todo el colegio, una persona única no podría hacer todo esto. Estamos con varios proyectos, hemos creado un grupo de trabajo de jóvenes del colectivo, que ha tenido una aceptación inmejorable, con más de 15 colegiados. Queremos celebrar un torneo de pádel del colectivo, realizar reuniones, tener actividad social del colectivo, coger todo lo bueno hecho y seguir fomentándolo.
